sábado, 16 de marzo de 2019

Mundo de silencio


Mundo de Silencio

Ninguno de los niños agazapados de rodillas en el arcón era Tomás. Él odiaba los aspavientos y miradas de reproche de los demás cuando corrían tras el balón. Prefería jugar a solas al puzle y a la peonza. Le buscaron en la alacena, bajo las camas y dentro de las tinajas. Registraron el pajar, los establos y el huerto.

Tomás ha encontrado un buen escondite, tras la puerta oculta, está sentado y encogido en ese hueco oscuro, junto a unos fajos de papeles sujetos con gomas. Su madre le encontrará seguro, porque en sus labios siempre lee: ”Tomás eres mi tesoro”, y aquí junto a él están los cristalitos de colores que ella se cuelga del cuello los días especiales.

1 comentario:

  1. Niño solitario el pequeño Tomás, seguro que llegará lejos.
    Muy bonito, Pablo.

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