lunes, 17 de junio de 2019

Mirlo blanco


Mirlo blanco

La primera vez que cruzo el charco. Estoy en la sala de embarque destino Nueva York. Frente a mí, a escasos tres metros, se sienta una mujer explosiva, de las que no pasan desapercibidas. Me obsequia una sonrisa. El vestido corto y su movimiento de piernas me desvelan su ropa interior muy sexy. Ruborizado desvío la mirada pero aquella prenda me  cautiva. Ella acaba sentándose a mi lado, aún no embarcamos. En la charla dice que me encuentra interesante y atractivo. Yo atónito, no dejo de mirar su escote. Me confiesa al oído que es actriz de cine erótico. En el avión intercambia su asiento para sentarse junto a mí. Tapados bajo las mantas comienzan unas turbulencias anatómicas culminadas en el aseo en varias ocasiones. Aterrizamos a este lado del charco entre suspiros. Por delante una semana prometedora de sexo salvaje. En el control de seguridad un policía me fotografía de frente y de perfil. Varón caucásico seis pies de altura. En mi mochila han encontrado una sustancia blanca. Por primera vez me siento un hombre objeto.

2 comentarios:

  1. Con este relato he participado en la página ENTC(Esta noche te cuento) tema en blanco num. 68. Sin suerte en los seleccionados ni mencionados.

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